En el seno de la Organización de Naciones Unidas (ONU) defienden una solución pacífica y negociada en la situación política de Venezuela, reseña la agencia Prensa Latina.
«Las negociaciones son la única forma de encontrar una solución pacífica a la situación» en Venezuela afirmó este martes el portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, al referirse a las conversaciones realizadas en Oslo, Noruega entre delegados del Gobierno y la oposición venezolanos.
Dujarric manifestó que esperan un verdadero compromiso entre las partes; asimismo, la vocera de la presidente de la Asamblea General, Monica Grayley, defendió una solución política y negociada, que beneficie al pueblo venezolano y contribuya a su bienestar.
Esa es la postura defendida por el Grupo para la Defensa de la Paz y los Principios de la Carta de la ONU, integrado por más de 60 países que pertenecen a la organización multilateral.
La agrupación busca hacer frente a posiciones de interferencia en los asuntos internos de Venezuela, como la del Grupo de Lima y la de Estados Unidos.
El mencionado Grupo integrado por más de 60 estados de la ONU trabaja en la salvaguarda de la independencia y soberanía de las naciones y rechaza la injerencia.
También se opone a la agresión contra Venezuela y cualquier pueblo soberano, así como a la politización de los asuntos humanitarios.
En el seno de la Organización de Naciones Unidas (ONU) defienden una solución pacífica y negociada en la situación política de Venezuela, reseña la agencia Prensa Latina.
«Las negociaciones son la única forma de encontrar una solución pacífica a la situación» en Venezuela afirmó este martes el portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, al referirse a las conversaciones realizadas en Oslo, Noruega entre delegados del Gobierno y la oposición venezolanos.
Dujarric manifestó que esperan un verdadero compromiso entre las partes; asimismo, la vocera de la presidente de la Asamblea General, Monica Grayley, defendió una solución política y negociada, que beneficie al pueblo venezolano y contribuya a su bienestar.
Esa es la postura defendida por el Grupo para la Defensa de la Paz y los Principios de la Carta de la ONU, integrado por más de 60 países que pertenecen a la organización multilateral.
La agrupación busca hacer frente a posiciones de interferencia en los asuntos internos de Venezuela, como la del Grupo de Lima y la de Estados Unidos.
El mencionado Grupo integrado por más de 60 estados de la ONU trabaja en la salvaguarda de la independencia y soberanía de las naciones y rechaza la injerencia.
También se opone a la agresión contra Venezuela y cualquier pueblo soberano, así como a la politización de los asuntos humanitarios.
Aunque el Banco Mundial excluye a Venezuela de sus proyecciones de crecimiento e inflación en América Latina y el Caribe, porque sus números distorsionan cualquier análisis colectivo, sí incluye al país entre los mayores riesgos de la región, porque un incremento de la corriente emigratoria venezolana ejercerá presiones fiscales, sociales y económicas que afectarían los resultados de las economías vecinas.
El organismo multilateral no aprecia un escenario de mejora de corto plazo para Venezuela, por lo que sus expectativas sobre el país son, de lejos, las peores en la región. La advertencia es que el resto de las naciones de América Latina y el Caribe deben considerar las implicaciones de un agravamiento de la crisis venezolana y prepararse para sus impactos, comenzando por el aspecto migratorio.
El informe del BM recoge cifras de otras fuentes oficiales y extraoficiales para medir la situación venezolana; sin embargo, se detiene en dos datos fundamentales: la salida de 3,7 millones de habitantes en los últimos años y la disminución de 1.000.000 de barriles diarios de la producción petrolera desde 2010, que implican, para los analistas del multilateral, elementos sustantivos de riesgo, porque permiten explicar la agudización de la crisis humanitaria.
Según el Banco Mundial, el resto de la región tendrá un crecimiento consolidado de 1,7% este año, lastrado en alguna medida por las moderadas expansiones que se esperan en México y Brasil, así como la contracción de -1,2% del PIB que proyecta para Argentina.
El incremento del consumo privado y una moderada inflación permitirán que el resto de América Latina y el Caribe puedan experimentar expansiones de 2,5% en 2020 y 2,7% en 2021.
No obstante, las tensiones comerciales que se producen entre Estados Unidos y China aportan incertidumbre a estas proyecciones, por el impacto negativo que tendrá el conflicto en estas naciones, lo que significa menor demanda de productos para América Latina y el Caribe, especialmente la proveniente del país asiático que se ha convertido en el principal mercado para las exportaciones de varios estados de la región.
Igualmente, el Banco Mundial resalta como elemento de riesgo el elevado endeudamiento externo de algunas economías grandes de la región, aunque indica que, en promedio, la relación deuda/PIB en América Latina y el Caribe se ubica en 80%, al cierre de 2018.
República Dominicana, con un crecimiento del PIB de 5% en 2019, y Panamá, con 5%, lideran las expectativas de la región, junto con Bolivia, que espera una expansión de 4%. Conviene resaltar el caso de la vecina Guyana que, por su actividad petrolera, tendría un crecimiento de 4,6% este año y de un asombroso 33,5% en 2020, para convertirse, de lejos, en el mejor resultado de la región, aún cuando se trata de una de las economías más pequeñas.
Aunque el Banco Mundial excluye a Venezuela de sus proyecciones de crecimiento e inflación en América Latina y el Caribe, porque sus números distorsionan cualquier análisis colectivo, sí incluye al país entre los mayores riesgos de la región, porque un incremento de la corriente emigratoria venezolana ejercerá presiones fiscales, sociales y económicas que afectarían los resultados de las economías vecinas.
El organismo multilateral no aprecia un escenario de mejora de corto plazo para Venezuela, por lo que sus expectativas sobre el país son, de lejos, las peores en la región. La advertencia es que el resto de las naciones de América Latina y el Caribe deben considerar las implicaciones de un agravamiento de la crisis venezolana y prepararse para sus impactos, comenzando por el aspecto migratorio.
El informe del BM recoge cifras de otras fuentes oficiales y extraoficiales para medir la situación venezolana; sin embargo, se detiene en dos datos fundamentales: la salida de 3,7 millones de habitantes en los últimos años y la disminución de 1.000.000 de barriles diarios de la producción petrolera desde 2010, que implican, para los analistas del multilateral, elementos sustantivos de riesgo, porque permiten explicar la agudización de la crisis humanitaria.
Según el Banco Mundial, el resto de la región tendrá un crecimiento consolidado de 1,7% este año, lastrado en alguna medida por las moderadas expansiones que se esperan en México y Brasil, así como la contracción de -1,2% del PIB que proyecta para Argentina.
El incremento del consumo privado y una moderada inflación permitirán que el resto de América Latina y el Caribe puedan experimentar expansiones de 2,5% en 2020 y 2,7% en 2021.
No obstante, las tensiones comerciales que se producen entre Estados Unidos y China aportan incertidumbre a estas proyecciones, por el impacto negativo que tendrá el conflicto en estas naciones, lo que significa menor demanda de productos para América Latina y el Caribe, especialmente la proveniente del país asiático que se ha convertido en el principal mercado para las exportaciones de varios estados de la región.
Igualmente, el Banco Mundial resalta como elemento de riesgo el elevado endeudamiento externo de algunas economías grandes de la región, aunque indica que, en promedio, la relación deuda/PIB en América Latina y el Caribe se ubica en 80%, al cierre de 2018.
República Dominicana, con un crecimiento del PIB de 5% en 2019, y Panamá, con 5%, lideran las expectativas de la región, junto con Bolivia, que espera una expansión de 4%. Conviene resaltar el caso de la vecina Guyana que, por su actividad petrolera, tendría un crecimiento de 4,6% este año y de un asombroso 33,5% en 2020, para convertirse, de lejos, en el mejor resultado de la región, aún cuando se trata de una de las economías más pequeñas.
El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, respaldó este martes la decisión de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de extender su período de vigencia hasta diciembre de 2020.
“Me parece muy bien que la Asamblea Nacional Constituyente esté hasta el 2020 protegiendo la estabilidad política, protegiendo el desarrollo de los derechos constitucionales, trabajando junto al pueblo, protegiendo al Estado, combatiendo al golpismo y al imperialismo”, expresó el jefe de Estado en transmisión conjunta de radio y televisión.
“Por encima de la Asamblea Constituyente no hay nadie, ningún poder del Estado. Nosotros estamos subordinados a la Asamblea Nacional Constituyente, poder del pueblo”, agregó el Mandatario Nacional desde el Palacio de Miraflores, en Caracas, durante la instalación del Consejo de Defensa y Seguridad de la Nación.
El pasado 20 de mayo, en sesión extraordinaria, la ANC aprobó por unanimidad la vigencia del Poder Plenipotenciario hasta al menos el 31 de diciembre del año 2020.
La ANC fue elegida el 30 de julio de 2017, en el marco de las acciones violentas perpetradas por la derecha venezolana, y se instaló formalmente el 4 de agosto del mismo año.
El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, respaldó este martes la decisión de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de extender su período de vigencia hasta diciembre de 2020.
“Me parece muy bien que la Asamblea Nacional Constituyente esté hasta el 2020 protegiendo la estabilidad política, protegiendo el desarrollo de los derechos constitucionales, trabajando junto al pueblo, protegiendo al Estado, combatiendo al golpismo y al imperialismo”, expresó el jefe de Estado en transmisión conjunta de radio y televisión.
“Por encima de la Asamblea Constituyente no hay nadie, ningún poder del Estado. Nosotros estamos subordinados a la Asamblea Nacional Constituyente, poder del pueblo”, agregó el Mandatario Nacional desde el Palacio de Miraflores, en Caracas, durante la instalación del Consejo de Defensa y Seguridad de la Nación.
El pasado 20 de mayo, en sesión extraordinaria, la ANC aprobó por unanimidad la vigencia del Poder Plenipotenciario hasta al menos el 31 de diciembre del año 2020.
La ANC fue elegida el 30 de julio de 2017, en el marco de las acciones violentas perpetradas por la derecha venezolana, y se instaló formalmente el 4 de agosto del mismo año.
Las cifras anunciadas por el Banco Central de Venezuela (BCV) sobre la inflación en los últimos años precisan el problema inflacionario en su justa dimensión, en contraste con los informes manipulados que sectores adversos al Gobierno Bolivariano buscan imponer, resaltó el economista Jesús Faría.
En entrevista exclusiva con la Agencia Venezolana de Noticias (AVN), detalló la notable diferencia entre las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) e indicadores de la Asamblea Nacional en desacato,que en su informe de 2018 señaló un índice inflacionario de 883,997%, siete veces superior al indicador del BCV.
Señala que se evidencia la intención de generar expectativas mucho más negativas de las existentes por las presiones inflacionarias y así agredir la economía “con el interés directo de seguir instrumentando políticas y acciones que apuntaran a una mayor desestabilización”.
Faría explicó que los niveles de inflación actuales se deben la especulación cambiaria, que actúa como un motor de alza de precios de bienes y servicios.
“Es una situación que enriquece a un grupo muy reducido de poderosos capitales que, a través de la creación de un mercado paralelo, han manipulado las variables y han alcanzado jugosas ganancias con el cambio de la moneda”, señala.
Además, hay un claro propósito político, que es desestabilizar económicamente al país para derrocar al Presidente constitucional, Nicolás Maduro.
Remarcó el constitiyente que la especulación en la economía venezolana, como rasgo estructural, con altas tasas de ganancias fomentadas no por productividad e innovación, son elementos intrínsecos al fenómeno inflacionario.
“La voracidad de parte de sectores empresariales venezolanos, sobre todo los que se ubican en los sectores importadores y comerciales, son graves problemas que tenemos que resolver”, añadió.
Sanciones promueven la hiperinflación
El economista destacó que los efectos de las sanciones financieras por parte de EEUU son notables en medio de la alteración de la variable inflacionaria, consecuencia de la caída del ingreso de divisas.
“La caída de la producción nacional por las sanciones y los niveles de escasez que allí se desprende, la posiblilidad de aprovechar mecanismos de financiamiento externo y todos los vínculos comerciales a nivel mundial, han generado distorsiones graves que se ven reflejados en los niveles de hiperinflación”, detalló.
Resaltó que el costo económico de las sanciones superan los 65.000 millones de dólares. “Una cifra colosal muy importante, que se alimenta de lo que hemos dejado de percibir. Hemos dejado de crecer por no disponer de condiciones que han sido deterioradas por las medidas ilegales del imperio norteamericano”, acotó.
Las cifras del informe del BCV indican que entre el período de julio y septiembre de 2018, sectores como el de la Construcción registró una caída de 67,9%; instituciones financieras y seguros 52,5%; y manufactura 46,1%.
Faría explicó que la actividad productiva está vinculada a las sanciones, al considerar que nuestra economía genera 95% de las divisas por exportación de hidrocarburos y EEUU al sancionar la actividad petrolera crea las condiciones para la contracción de la producción, por ser este país el mayor comprador de crudo.
El resultado es “Que no hay suficientes divisas para abastecer al mercado productivo, doméstico, bienes, servicios, insumos maquinarias, entre otros”, recalcó.
Faría resaltó que “solamente en condiciones de paz y soberanía” se garantiza la aplicación de una política de crecimiento y desarrollo en el mediano y largo plazo.
Elevar la producción
Añadió que el Gobierno Bolivariano realiza enormes esfuerzos en conjunto con el Partido Socialista Unido de Venezuela, movimientos sociales y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, para derrotar al principal enemigo de la Patria, que son las políticas de agresión imperialista contra Venezuela.
El experto dijo que se debe trabajar en una línea de acción político-económica correcta, para restablecer los equilibrios económicos en materia monetaria, financiera, fiscal y cambiaria; además de estimular el crecimiento de la producción, especialmente en el ámbito petrolero, para estabilizar la variable cambiaria.
“Toda la fuerza de la Nación debe estar concentrada en la recuperación de la producción petrolera, porque desataría muchos nudos que tienen atada en este momento a la economía nacional e impide su crecimiento”, reiteró Faría.
Subrayó que los esfuerzos que se hagan para alcanzar elevar la producción en los sectores agrícolas, alimentario, farmacéutico impactarán en el sector privado, el cual ocupa el 70% de la economía. “De allí se podría desencadenar un efecto positivo para la recuperación de nuestros niveles económicos”, resumió el constituyente.
Señalo que el sector empresarial politizado es manipulado por “golpistas de la oposición que hacen valer su poder económico como un arma para atentar contra la estabilidad democrática del país y la continuidad del gobierno electo del Presidente Nicolás Maduro”.
Por último, Faría resaltó que el pueblo es consciente de que la agresión económica no es la vía para la solución de los problemas. “Eso nos garantiza que hay un contexto de tranquilidad y paz. La confrontación por el poder político se mantendrá y nosotros tendremos siempre que confrontar a la contrarrevolución en cada uno de los escenarios donde efectivamente las sanciones se agudizarán. Pero tendremos mucha más fuerza para ocuparnos de nuestros problemas”, sentenció.
Las cifras anunciadas por el Banco Central de Venezuela (BCV) sobre la inflación en los últimos años precisan el problema inflacionario en su justa dimensión, en contraste con los informes manipulados que sectores adversos al Gobierno Bolivariano buscan imponer, resaltó el economista Jesús Faría.
En entrevista exclusiva con la Agencia Venezolana de Noticias (AVN), detalló la notable diferencia entre las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) e indicadores de la Asamblea Nacional en desacato,que en su informe de 2018 señaló un índice inflacionario de 883,997%, siete veces superior al indicador del BCV.
Señala que se evidencia la intención de generar expectativas mucho más negativas de las existentes por las presiones inflacionarias y así agredir la economía “con el interés directo de seguir instrumentando políticas y acciones que apuntaran a una mayor desestabilización”.
Faría explicó que los niveles de inflación actuales se deben la especulación cambiaria, que actúa como un motor de alza de precios de bienes y servicios.
“Es una situación que enriquece a un grupo muy reducido de poderosos capitales que, a través de la creación de un mercado paralelo, han manipulado las variables y han alcanzado jugosas ganancias con el cambio de la moneda”, señala.
Además, hay un claro propósito político, que es desestabilizar económicamente al país para derrocar al Presidente constitucional, Nicolás Maduro.
Remarcó el constitiyente que la especulación en la economía venezolana, como rasgo estructural, con altas tasas de ganancias fomentadas no por productividad e innovación, son elementos intrínsecos al fenómeno inflacionario.
“La voracidad de parte de sectores empresariales venezolanos, sobre todo los que se ubican en los sectores importadores y comerciales, son graves problemas que tenemos que resolver”, añadió.
Sanciones promueven la hiperinflación
El economista destacó que los efectos de las sanciones financieras por parte de EEUU son notables en medio de la alteración de la variable inflacionaria, consecuencia de la caída del ingreso de divisas.
“La caída de la producción nacional por las sanciones y los niveles de escasez que allí se desprende, la posiblilidad de aprovechar mecanismos de financiamiento externo y todos los vínculos comerciales a nivel mundial, han generado distorsiones graves que se ven reflejados en los niveles de hiperinflación”, detalló.
Resaltó que el costo económico de las sanciones superan los 65.000 millones de dólares. “Una cifra colosal muy importante, que se alimenta de lo que hemos dejado de percibir. Hemos dejado de crecer por no disponer de condiciones que han sido deterioradas por las medidas ilegales del imperio norteamericano”, acotó.
Las cifras del informe del BCV indican que entre el período de julio y septiembre de 2018, sectores como el de la Construcción registró una caída de 67,9%; instituciones financieras y seguros 52,5%; y manufactura 46,1%.
Faría explicó que la actividad productiva está vinculada a las sanciones, al considerar que nuestra economía genera 95% de las divisas por exportación de hidrocarburos y EEUU al sancionar la actividad petrolera crea las condiciones para la contracción de la producción, por ser este país el mayor comprador de crudo.
El resultado es “Que no hay suficientes divisas para abastecer al mercado productivo, doméstico, bienes, servicios, insumos maquinarias, entre otros”, recalcó.
Faría resaltó que “solamente en condiciones de paz y soberanía” se garantiza la aplicación de una política de crecimiento y desarrollo en el mediano y largo plazo.
Elevar la producción
Añadió que el Gobierno Bolivariano realiza enormes esfuerzos en conjunto con el Partido Socialista Unido de Venezuela, movimientos sociales y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, para derrotar al principal enemigo de la Patria, que son las políticas de agresión imperialista contra Venezuela.
El experto dijo que se debe trabajar en una línea de acción político-económica correcta, para restablecer los equilibrios económicos en materia monetaria, financiera, fiscal y cambiaria; además de estimular el crecimiento de la producción, especialmente en el ámbito petrolero, para estabilizar la variable cambiaria.
“Toda la fuerza de la Nación debe estar concentrada en la recuperación de la producción petrolera, porque desataría muchos nudos que tienen atada en este momento a la economía nacional e impide su crecimiento”, reiteró Faría.
Subrayó que los esfuerzos que se hagan para alcanzar elevar la producción en los sectores agrícolas, alimentario, farmacéutico impactarán en el sector privado, el cual ocupa el 70% de la economía. “De allí se podría desencadenar un efecto positivo para la recuperación de nuestros niveles económicos”, resumió el constituyente.
Señalo que el sector empresarial politizado es manipulado por “golpistas de la oposición que hacen valer su poder económico como un arma para atentar contra la estabilidad democrática del país y la continuidad del gobierno electo del Presidente Nicolás Maduro”.
Por último, Faría resaltó que el pueblo es consciente de que la agresión económica no es la vía para la solución de los problemas. “Eso nos garantiza que hay un contexto de tranquilidad y paz. La confrontación por el poder político se mantendrá y nosotros tendremos siempre que confrontar a la contrarrevolución en cada uno de los escenarios donde efectivamente las sanciones se agudizarán. Pero tendremos mucha más fuerza para ocuparnos de nuestros problemas”, sentenció.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reiteró su apoyo al diálogo entre el Gobierno Bolivariano y la oposición en Venezuela, por lo que esperan que se produzcan compromisos entre las partes, dijo el portavoz del secretario general de la citada instancia, Stéphane Dujarric, al referirse a las conversaciones en Oslo entre los delegados asistentes.
Las negociaciones son la única forma de encontrar una solución pacífica a la situación en ese país suramericano, recalcó Dujarric en su habitual conferencia de prensa, según reportó la agencia de noticias Prensa Latina, en su portal web.
La información agregó que también la vocera de la presidenta de la Asamblea General de la ONU, Monica Grayley, defendió una solución política y negociada, que beneficie al pueblo venezolano y contribuya a su bienestar.
Esa es la postura defendida por el Grupo para la Defensa de la Paz y los Principios de la Carta de la ONU, integrado por más de 60 países que pertenecen a la organización multilateral.
Además, esa agrupación busca hacer frente a posiciones de interferencia en los asuntos internos de Venezuela, como la del Grupo de Lima y la de Estados Unidos.
El mencionado Grupo para la Defensa de la Paz intenta salvaguardar la independencia y soberanía de las naciones y rechaza la injerencia.
Asimismo, se opone a la agresión contra Venezuela y cualquier pueblo soberano, así como a la politización de los asuntos humanitarios.
Esos más de 60 Estados de la ONU destacan que las sanciones contra Venezuela causan gran sufrimiento a ese pueblo, pues, impiden el acceso a medicamentos y productos de primera necesidad, y bloquean los activos de la nación en el extranjero.
Por otra parte, el Grupo de Lima prometió este lunes que seguirá ejerciendo presión sobre Venezuela, una postura criticada por actores internacionales, debido a su carácter injerencista en los asuntos internos de una nación.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reiteró su apoyo al diálogo entre el Gobierno Bolivariano y la oposición en Venezuela, por lo que esperan que se produzcan compromisos entre las partes, dijo el portavoz del secretario general de la citada instancia, Stéphane Dujarric, al referirse a las conversaciones en Oslo entre los delegados asistentes.
Las negociaciones son la única forma de encontrar una solución pacífica a la situación en ese país suramericano, recalcó Dujarric en su habitual conferencia de prensa, según reportó la agencia de noticias Prensa Latina, en su portal web.
La información agregó que también la vocera de la presidenta de la Asamblea General de la ONU, Monica Grayley, defendió una solución política y negociada, que beneficie al pueblo venezolano y contribuya a su bienestar.
Esa es la postura defendida por el Grupo para la Defensa de la Paz y los Principios de la Carta de la ONU, integrado por más de 60 países que pertenecen a la organización multilateral.
Además, esa agrupación busca hacer frente a posiciones de interferencia en los asuntos internos de Venezuela, como la del Grupo de Lima y la de Estados Unidos.
El mencionado Grupo para la Defensa de la Paz intenta salvaguardar la independencia y soberanía de las naciones y rechaza la injerencia.
Asimismo, se opone a la agresión contra Venezuela y cualquier pueblo soberano, así como a la politización de los asuntos humanitarios.
Esos más de 60 Estados de la ONU destacan que las sanciones contra Venezuela causan gran sufrimiento a ese pueblo, pues, impiden el acceso a medicamentos y productos de primera necesidad, y bloquean los activos de la nación en el extranjero.
Por otra parte, el Grupo de Lima prometió este lunes que seguirá ejerciendo presión sobre Venezuela, una postura criticada por actores internacionales, debido a su carácter injerencista en los asuntos internos de una nación.
La Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV), mediante su presidente Humberto Figuera, indicó que sólo permanecen en el país 9 aerolíneas internacionales a nivel nacional.
(Tramadol)
La Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV), mediante su presidente Humberto Figuera, indicó que sólo permanecen en el país 9 aerolíneas internacionales a nivel nacional.
(Tramadol)
A través del esfuerzo conjunto entre los trabajadores, el Gobierno Nacional y la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) se adelantan los trabajos para la recuperación operativa de la Siderúrgica del Orinoco Alfredo Maneiro (Sidor).
El Vicepresidente Territorial de la CVG, José Meléndez, señaló que actualmente se adelantan trabajos de mantenimiento en la línea “B” de la Planta de Pellas, reseñó AVN.
En esta planta se produce el material básico para alimentar los hornos donde se produce acero en esta factoría ubicada en la Zona Industrial Matanzas de Ciudad Guayana, estado Bolívar, utilizando mineral de hierro suministrado por la empresa estatal Ferrominera Orinoco (FMO), que opera yacimientos en el municipio Angostura de esta región.
“La semana próxima debemos estar iniciando operaciones en esta línea, tras lo cual continuaremos trabajos en la Planta de Planchones, Midrex y otras áreas”, apuntó Meléndez.
El vicepresidente territorial de la CVG, indicó que estos trabajos se realizan a pesar de la guerra económica que la derecha mantiene contra el pueblo venezolano. “Vamos a recuperar todas las áreas vitales de Sidor para ponerla en plena producción con apoyo de nuestros trabajadores y autoridades”, recalcó.
En este punto, resaltó que el objetivo es que Sidor produzca a niveles que le garanticen tanto su autosustentabilidad económica, así como generar divisas para la nación por concepto de exportación de acero y pellas.
Sidor tiene una capacidad instalada de producción de 4 millones de toneladas métricas/año de acero de alta calidad.
A través del esfuerzo conjunto entre los trabajadores, el Gobierno Nacional y la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) se adelantan los trabajos para la recuperación operativa de la Siderúrgica del Orinoco Alfredo Maneiro (Sidor).
El Vicepresidente Territorial de la CVG, José Meléndez, señaló que actualmente se adelantan trabajos de mantenimiento en la línea “B” de la Planta de Pellas, reseñó AVN.
En esta planta se produce el material básico para alimentar los hornos donde se produce acero en esta factoría ubicada en la Zona Industrial Matanzas de Ciudad Guayana, estado Bolívar, utilizando mineral de hierro suministrado por la empresa estatal Ferrominera Orinoco (FMO), que opera yacimientos en el municipio Angostura de esta región.
“La semana próxima debemos estar iniciando operaciones en esta línea, tras lo cual continuaremos trabajos en la Planta de Planchones, Midrex y otras áreas”, apuntó Meléndez.
El vicepresidente territorial de la CVG, indicó que estos trabajos se realizan a pesar de la guerra económica que la derecha mantiene contra el pueblo venezolano. “Vamos a recuperar todas las áreas vitales de Sidor para ponerla en plena producción con apoyo de nuestros trabajadores y autoridades”, recalcó.
En este punto, resaltó que el objetivo es que Sidor produzca a niveles que le garanticen tanto su autosustentabilidad económica, así como generar divisas para la nación por concepto de exportación de acero y pellas.
Sidor tiene una capacidad instalada de producción de 4 millones de toneladas métricas/año de acero de alta calidad.
El Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat), alcanzó una recaudación global durante enero y mayo de 2 billones 980 millardos 891 millones 577 mil 557 bolívares, lo significa más recursos para la Nación que permitirán reforzar los planes y proyectos sociales, informó el Superintendente Aduanero, José David Cabello Rondón.
Solo en el mes de mayo, se recaudó un billón 117 millardos 387 millones 197 mil 143 bolívares, resaltó Cabello Rondón a través de la red social Twitter.
La recaudación de Impuesto Sobre la Renta (ISLR), en el mes de mayo, se ubicó en 149 millardos 816 millones 180 mil bolívares.
El titular de la cartera de tributos agregó que lo recaudado por Impuesto al Valor Agregado (IVA), alcanzó durante el quinto mes del año el monto total de 548 millardos 147 millones 367 mil bolívares.
En lo que respecta tributos aduaneros, Seniat recaudó 48 millardos 425 millones 291 mil bolívares , mientras que por otras rentas internas, se recaudó 370 millardos, 998 millones, 358 mil 307 bolívares.
El Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat), alcanzó una recaudación global durante enero y mayo de 2 billones 980 millardos 891 millones 577 mil 557 bolívares, lo significa más recursos para la Nación que permitirán reforzar los planes y proyectos sociales, informó el Superintendente Aduanero, José David Cabello Rondón.
Solo en el mes de mayo, se recaudó un billón 117 millardos 387 millones 197 mil 143 bolívares, resaltó Cabello Rondón a través de la red social Twitter.
La recaudación de Impuesto Sobre la Renta (ISLR), en el mes de mayo, se ubicó en 149 millardos 816 millones 180 mil bolívares.
El titular de la cartera de tributos agregó que lo recaudado por Impuesto al Valor Agregado (IVA), alcanzó durante el quinto mes del año el monto total de 548 millardos 147 millones 367 mil bolívares.
En lo que respecta tributos aduaneros, Seniat recaudó 48 millardos 425 millones 291 mil bolívares , mientras que por otras rentas internas, se recaudó 370 millardos, 998 millones, 358 mil 307 bolívares.
Petróleos de Venezuela (Pdvsa) incrementa la confiabilidad operacional del patio de tanques de Amuay, cuya capacidad supera el millón 184 mil barriles, en el Complejo Refinador de Paraguaná (CRP), estado Falcón, informó Prensa Latina.
Las obras están encabezadas por la empresa portuguesa Cimontubo, que cumple con los parámetros y de seguridad descritos en la norma internacional para la construcción de almacenamiento petrolero, lo que supone entre otros beneficios la preservación del medio ambiente.
“Estamos conscientes del impacto de este proyecto para el CRP, por eso mantenemos el compromiso de culminarlo con los más altos estándares de calidad, costos y seguridad”, indicó Miguel Petit, líder del proyecto de la Gerencia Técnica.
La ejecución de este proyecto demuestra el compromiso, la identificación y la fortaleza del trabajo del Centro de Refinación Paraguaná, considerada la segunda con mayor capacidad a escala internacional.
Además, esta unión apuesta por superar el cerco económico y financiero que ha impuesto el Gobierno de Estados Unidos contra Venezuela y su producción petrolera.
Petróleos de Venezuela (Pdvsa) incrementa la confiabilidad operacional del patio de tanques de Amuay, cuya capacidad supera el millón 184 mil barriles, en el Complejo Refinador de Paraguaná (CRP), estado Falcón, informó Prensa Latina.
Las obras están encabezadas por la empresa portuguesa Cimontubo, que cumple con los parámetros y de seguridad descritos en la norma internacional para la construcción de almacenamiento petrolero, lo que supone entre otros beneficios la preservación del medio ambiente.
“Estamos conscientes del impacto de este proyecto para el CRP, por eso mantenemos el compromiso de culminarlo con los más altos estándares de calidad, costos y seguridad”, indicó Miguel Petit, líder del proyecto de la Gerencia Técnica.
La ejecución de este proyecto demuestra el compromiso, la identificación y la fortaleza del trabajo del Centro de Refinación Paraguaná, considerada la segunda con mayor capacidad a escala internacional.
Además, esta unión apuesta por superar el cerco económico y financiero que ha impuesto el Gobierno de Estados Unidos contra Venezuela y su producción petrolera.
El sector manufacturero venezolano ha caído un 95% desde 1999, cuando el fallecido presidente Hugo Chávez llegó al poder, ahora en manos de su sucesor designado Nicolás Maduro, según dijo el máximo representante de Conindustria, Juan Pablo Olalquiaga, a EFE.
Olalquiaga aseguró que «lo que está operando en términos de capacidad de manufactura en Venezuela en este momento está cerca del 5%» si se compara «con lo que había al final del segundo gobierno de Rafael Caldera».
La semana pasada, luego de más de tres años de silencio oficial, el Banco Central de Venezuela (BCV) reveló que el producto interno bruto (PIB) cayó un 22,5% en el tercer trimestre del 2018, lo que significa encadenar 19 trimestres de retroceso de la economía venezolana, aunque algunos sectores han sido más afectados.
Es el caso del sector industrial, que para el período julio-septiembre de 2018 sumaba 21 trimestres seguidos con caída del PIB manufacturero.
Según Olalquiaga, la situación está lejos de revertirse por cuanto, en comparación con 2018, «este ha sido un año sustancialmente más complejo para poder sostener operaciones comerciales».
En Venezuela, explicó el representante gremial, operaban alrededor de 12.700 empresas industriales y para diciembre del año pasado apenas trabajaban 2.500, y «a estas alturas estoy seguro que van quedando menos».
La pérdida de poder adquisitivo de los consumidores, la precariedad de la infraestructura (electricidad y agua), la escasez de combustibles, los efectos de la migración, la caída de la competitividad por la sobrevaluación del bolívar (…) son los principales elementos que agobian a los industriales.
Olalquiaga explicó que la contracción del poder adquisitivo de los venezolanos, afectados por la hiperinflación y la caída de los ingresos, ha incidido en los volúmenes de venta de las empresas y, por tanto, amenazan la sostenibilidad de las mismas.
«Las compañías que no venden, a su vez no pueden pagar nómina y se empiezan a encoger de una manera importante», refirió.
El sector industrial no escapa a los problemas de infraestructura que arrastra el país. Los cortes de electricidad que se agravaron desde marzo pasado, la falta de agua y las dificultades para acceder a Internet, son algunos de los elementos que identifica Olalquiaga.
Asimismo, señaló que la recurrente escasez de papel moneda limita las posibilidades para que las personas paguen los pasajes y puedan ir a sus trabajos, incidiendo sobre el ausentismo laboral.
A lo anterior se suman los efectos de la migración venezolana -que la ONU calcula en más de 3.000.000 de personas en los últimos años-, que ha implicado «la pérdida de experiencia y pérdida de experticia», según Olalquiaga.
Los controles de precios también han complicado la situación para algunas empresas que han optado por dejar de elaborar ciertos productos -como es el caso de lubricantes, metalmecánico o autopartes-, o simplemente cerrar las plantas.
Olalquiaga dijo que las industrias han sido afectadas por la ausencia de financiamiento, como consecuencia de las limitaciones que tiene la banca venezolana con el encaje legal, que es el porcentaje de los depósitos que deben congelar en el Banco Central.
El sector manufacturero venezolano ha caído un 95% desde 1999, cuando el fallecido presidente Hugo Chávez llegó al poder, ahora en manos de su sucesor designado Nicolás Maduro, según dijo el máximo representante de Conindustria, Juan Pablo Olalquiaga, a EFE.
Olalquiaga aseguró que «lo que está operando en términos de capacidad de manufactura en Venezuela en este momento está cerca del 5%» si se compara «con lo que había al final del segundo gobierno de Rafael Caldera».
La semana pasada, luego de más de tres años de silencio oficial, el Banco Central de Venezuela (BCV) reveló que el producto interno bruto (PIB) cayó un 22,5% en el tercer trimestre del 2018, lo que significa encadenar 19 trimestres de retroceso de la economía venezolana, aunque algunos sectores han sido más afectados.
Es el caso del sector industrial, que para el período julio-septiembre de 2018 sumaba 21 trimestres seguidos con caída del PIB manufacturero.
Según Olalquiaga, la situación está lejos de revertirse por cuanto, en comparación con 2018, «este ha sido un año sustancialmente más complejo para poder sostener operaciones comerciales».
En Venezuela, explicó el representante gremial, operaban alrededor de 12.700 empresas industriales y para diciembre del año pasado apenas trabajaban 2.500, y «a estas alturas estoy seguro que van quedando menos».
La pérdida de poder adquisitivo de los consumidores, la precariedad de la infraestructura (electricidad y agua), la escasez de combustibles, los efectos de la migración, la caída de la competitividad por la sobrevaluación del bolívar (…) son los principales elementos que agobian a los industriales.
Olalquiaga explicó que la contracción del poder adquisitivo de los venezolanos, afectados por la hiperinflación y la caída de los ingresos, ha incidido en los volúmenes de venta de las empresas y, por tanto, amenazan la sostenibilidad de las mismas.
«Las compañías que no venden, a su vez no pueden pagar nómina y se empiezan a encoger de una manera importante», refirió.
El sector industrial no escapa a los problemas de infraestructura que arrastra el país. Los cortes de electricidad que se agravaron desde marzo pasado, la falta de agua y las dificultades para acceder a Internet, son algunos de los elementos que identifica Olalquiaga.
Asimismo, señaló que la recurrente escasez de papel moneda limita las posibilidades para que las personas paguen los pasajes y puedan ir a sus trabajos, incidiendo sobre el ausentismo laboral.
A lo anterior se suman los efectos de la migración venezolana -que la ONU calcula en más de 3.000.000 de personas en los últimos años-, que ha implicado «la pérdida de experiencia y pérdida de experticia», según Olalquiaga.
Los controles de precios también han complicado la situación para algunas empresas que han optado por dejar de elaborar ciertos productos -como es el caso de lubricantes, metalmecánico o autopartes-, o simplemente cerrar las plantas.
Olalquiaga dijo que las industrias han sido afectadas por la ausencia de financiamiento, como consecuencia de las limitaciones que tiene la banca venezolana con el encaje legal, que es el porcentaje de los depósitos que deben congelar en el Banco Central.