La Asamblea Nacional inició este miércoles la primera reunión de la “Consulta Nacional del País que Queremos Todos”, iniciativa que convoca a todos los venezolanos y a las organizaciones de la sociedad civil a debatir propuestas para la construcción del país del futuro.
La actividad contó con la participación de los panelistas: Humberto García Larralde, Ronald Balza, Alejandro Grisanti, Ricardo Villasmil y Orlando Ochoa, bajo la dirección del exministro de Cordiplan, Werner Corrales Leal.
Ronald Balza en su participación como ponente, aseveró que Venezuela no cuenta con una economía productiva por tres problemas fundamentales: inestabilidad, obsolescencia y la falta de productividad.
En este sentido indicó que la nación carece de innovación, producto del bajo presupuesto con el que cuentan las universidades en el país, además de la falta de incentivos para poder generar conocimientos, así como no contar con una infraestructura necesaria.
Dijo que la improductividad no es una marca que se coloca sobre los trabajadores o las empresas, sino en todo el sistema dentro del cual se está funcionando. De igual forma, consideró la falta de incentivo como el mayor problema.
Por su parte Humberto García Larralde, durante su ponencia, aseveró que el “País que Queremos Todos” debe ser una nación post-rentista, porque, Venezuela no puede seguir dependiendo exclusivamente del petróleo”.
Al respecto, resaltó que la nación debe buscar otra manera para sustentar el desarrollo con el fin de resolver las necesidades de los venezolanos, por varias razones básicas: primero, no hay una actividad económica diversificada con otra fuente de desarrollo; segundo, probablemente no regresará a 100 bolívares el barril de petróleo debido a las nuevas tecnologías para su producción y, por último, la reducción de combustibles fósiles por parte del mercado norteamericano y el europeo.
El economista y profesor de la Universidad Central de Venezuela, García Larralde consideró que la superación del rentismo significa crear un marco institucional distinto al actual.
Señaló que las instituciones son las reinas del juego con las cuales funciona la sociedad, porque estas son el incentivo que moldean los agentes económicos y a cada integrante de la población ya que aceptan, prenden o castigan determinado comportamiento.
“El reto es construir una institucionalidad que promueva el desarrollo de la competitividad, basado en lo tecnológico, el aprovechamiento del talento y la capacidad de innovación”, refirió.
Alejandro Grisanti, jefe de Investigación para América Latina de Barclays, declaró por su parte que Venezuela necesita una estabilización y no un ajuste. Advirtió que un ajuste representaría un gran costo político para el país.
Explicó que un ajuste se refiere cuando un país está viviendo muy por encima de sus posibilidades y cuando sus ciudadanos están consumiendo más de lo que puedan consumir, “por lo tanto es necesario reducir, ya que este tipo de economía no puede seguir así a largo plazo”.
En este sentido, recordó que en el año 1989 Venezuela hizo un ajuste y que en el actual gobierno también ya se dio, “porque los excesos vividos por la nación en el 2012 Nicolás Maduro ya lo esfumó”, indicó.
La estabilización señalada por Grisanti se basa en tres etapas. Subsanar la emergencia entre 100 a 200 días, a través de subsidio directo a la población para lograr reducir la escasez; la estabilidad económica, y como tercero, una reforma estructural “que nos llevará al país que queremos, con el fin de diversificar las exportaciones y dejar la estructura rentista”, señaló.
Orlando Ochoa, por su parte, aseguró que la innovación funciona en la frontera de producción de países y los sectores más avanzados.
Añadió que esto se logra con investigación, desarrollo, mejores prácticas y emular a otros países hasta llegar a la referida frontera de producción a través de los sectores claves que en Venezuela son: petróleo, minería, agricultura, energía de bajo costo, turismo y nicho de tecnología y capital humano.
Por último, Ricardo Villasmil, aseguró que en Venezuela es fundamental el ejercicio del liderazgo, así como la práctica de informar, porque hay venezolanos que sueñan con un país imposible de concebir, si se mantiene la idea de una nación rentista.
